Rosa más o menos el amigo llanero te a dado una solución, pero yo creo que en muchos casos los hábitos de los niños los calcan de sus progenitores, no comento que sea el caso, cuidado, pero lo primero que deberíamos dar ejemplo somos nosotros, y tener una charla con el niño o niña, explicando el uso de ese cacharro. Por desgracia esto cada vez es más habitual en nuestra sociedad, no podemos vivir si este cacharro, pero con un uso responsable y un poco de voluntad por ambas partes, ya vera como se va solucionando. Muchas veces ayuda una buena charla, sabiendo sus intereses, si le gusta el deporte, intentar involucrarse un poco más en su vida, pero cuidado, involucrar no es exigir, cada cual tiene su momento, lo que hay que unir dichos momentos, como comento, que nos vea como un amigo, no como sus padres, tal vez no sea tu caso, pero todo esto siempre ayuda.
Ya comento que esta, es una opinión, muy personal, y que, cada caso es un mundo.Y claro, yo tampoco soy el más indicado para dar consejos.