No sé a vosotros, pero a mí, lo de estrenar teléfono me da una cierta pereza: cambia la SIM, configura el teléfono, copia los datos… Así que en este post voy a tratar de simplificaros la vida para que estrenar teléfono Android sea una experiencia lo más agradable posible:

1. Enciende el teléfono y conéctate a la red WiFi

Mantén presionado el botón de encendido/apagado de tu nuevo teléfono hasta que aparezca el logotipo de la marca en la pantalla. Una vez que veas el logotipo, suelta el botón y el teléfono se iniciará. A continuación deberás seleccionar el Idioma que quieres utilizar en tu móvil.

Asegúrate de que la batería tiene al menos un 20% de carga para evitar problemas durante la configuración ya que es probable que se reinicie en una o dos ocasiones. Aunque lo ideal es que la cargues hasta el 80% por lo menos.

2. Configura la cuenta de Google

Si tienes una cuenta de Google, inicia sesión con tus credenciales. Si no la tienes, puedes crear una nueva cuenta. Este paso es fundamental para poder usar un teléfono Android y es, además, donde decides qué datos vas a compartir con Google: ubicación, enviar datos de uso y diagnóstico, conexiones, autocompletar, contraseñas, anuncios…

Tómate tu tiempo porque es muy importante que comprendas lo que compartes con Google y el impacto que tiene en tu privacidad.

3. Configura la seguridad del dispositivo

Configura el método de desbloqueo de pantalla en función de las posibilidades que ofrezca tu teléfono: patrón, contraseña, huella o reconocimiento facial. Esto es muy importante para proteger tu teléfono y los datos que almacenas en caso de pérdida o robo.

4. Restaura los datos y aplicaciones desde tu antiguo terminal

En este punto no hay una única forma de hacerlo y dependerá en parte del terminal que estrenes, aunque las marcas más reconocidas usan sistemas similares que hace de este paso algo bastante sencillo. También puedes configurar tu cuenta de Google para respaldar y sincronizar tus datos automáticamente.

5. Gestiona las aplicaciones y busca actualizaciones de las mismas y del sistema operativo

En este paso debes organizar las apps que usas y eliminar aquellas que vienen preinstaladas con el terminal pero no vas a usar. Igualmente, dentro de las opciones del sistema deberás revisar si existen actualizaciones de seguridad para el sistema operativo.

6. Explora las Configuraciones del Teléfono

Dependiendo del terminal y el fabricante, esta parte puede llevarte mucho tiempo ya que hay infinidad de personalizaciones que puedes aplicar. No es necesario que lo hagas el primer día, puedes ir configurando poco a poco. Por ejemplo, un día revisas las opciones de sonido, otro las de visualización, otro las notificaciones… Tampoco es necesario que te pegues la paliza el primer día.

¡Listo! Tu teléfono Android está ahora configurado y listo para ser utilizado. No dudes en explorar y experimentar con tu nuevo dispositivo para aprovechar al máximo todas las características y capacidades que ofrece. ¡Disfruta de tu nueva adquisición!

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