Parecido a lo que se comenta en
este hilo, ¿por qué elegir Suop?, me gustaría preguntaros por vuestra historia en el mundo de la telefonía móvil.
Voy a empezar con la mía:
Comencé en la telefonía móvil sin nisiquiera saber de qué se trataba. Hace 17 años era 1997 y en casa compramos un Alcatel One Touch Easy de Movistar para mi padre. Él era marinero y pasaba mucho tiempo fuera de casa, en el puerto o en alta mar. Había temporadas que se tiraba semanas enteras navegando, incluso un mes. Y cuando se acercaba a la costa, con su móvil nos llamaba un par de minutos (de aquella era prohibitibo usar el teléfono) para preguntar "qué tal". ¿Pero qué otra opción había?. Recuerdo el día que compramos el teléfono y lo desempaquetamos juntos. ¡Mi primer unboxing!.
En 1999 y como premio por aprobar todo y empezar Bachillerato me regalaron un Nokia 3210 de Movistar. Yo lo tenía claro. El diseño del Nokia me parecía del futuro, con su antena interior era una pasada. Quería ese terminal y fuimos a comprarlo al Centro Comercial de la ciudad. El trato era sencillo: "ya eres mayor, tú te administras las recargas". Mis padres jamás me pagarían una recarga.
Con mi Nokia tiré un montón de años. Eso sí que era un móvil robusto, no como los que hacen ahora. Tenía de todo: alarma, calculadora, sms, llamadas, el juego snake... hasta que su batería empezó a fallar no me planteé cambiarlo... por un SonyEricsson T230 (plata y azul) liberado que me dio mi tío en 2004.
A caballo regalado no le mires el diente. Pero la calidad del SonyEricsson no era comparable a la del Nokia. Aún así, mi primer móvil de pantalla a color duró lo suyo. Fue en 2008 cuando lo cambié por otro porque los pines del puerto de carga se escacharraron. Mi nueva elección: un Z310i, ¡con cámara! que por primera vez tuve que pagar de mi bolsillo, y que me salió con un buen descuento gracias al plan "Estrena" de Movistar. Por cierto, la cámara era VGA mala, mala.
Llevaba un tiempo siguiendo a Yoigo, y en 2010 me cansé de las tarifas abusivas de Movistar y les dí carpetazo. ¡11 años después!. Dios mío, que aguante tuve. Por aquel entonces Yoigo tenía cobertura propia en todas las ciudades más grandes de mi provincia y, dónde no tenía, utilizaba las antenas de Movistar. Además, conocía a varias personas que trabajaban conmigo y tenían Yoigo. Así que en el verano de 2010 hice mi primera portabilidad de prepago Movistar a contrato Yoigo. Me llevé "de regalo" un Samsung GT-s5600 negro.
En Yoigo estuve dos años... y un par de meses, creo. Y durante ese tiempo descubrí que nadie daba duros a cuatro pesetas, y que no es buena idea atarse a ninguna compañía.
Paralelamente a mi época en Yoigo, me entró un afán loco por probar todas las compañías virtuales habídas y por haber: tuve prepagos de Simyo, Carrefour Móvil, MásMóvil, Eroski móvil y Tuenti. Y a finales de 2012 casi 2013 me decidí por eleminar morralla, deshacerme de todas esas tarjetas y portar mi línea principal de contrato Yoigo a contrato Simyo, sin permanencias. Fue una buena decisión, porque unos meses después me marché al extranjero. Gracias a tener un contrato sin consumo mínimo, no pagué nada durante todo el año que estuve fuera.
Pero desde mi vuelta siempre tenía un sabor agridulce con Simyo. Pienso que su Internet no va todo lo rápido que debería de ir. Por eso, me cambié nuevamente de operadora. Batacazo con Vodafone y como llevaba un tiempo siguiendo el proyecto de Suop, otra vez portabilidad.
Y aquí estoy. De momento todo bien.
Saludos.