Con las altas temperaturas que estamos teniendo este verano, es posible que notemos que nuestro teléfono se calienta con más frecuencia de lo habitual.

Es importante que, cuando nos demos cuenta de que el móvil está demasiado caliente, tomemos las medidas necesarias para enfriarlo lo antes posible, ya que de lo contrario podemos perjudicar tanto al dispositivo como a su batería.

Algunas de las acciones que podemos llevar a cabo para enfriar nuestro teléfono son:

• Cerrar todas las aplicaciones: el teléfono ya se calienta de por sí si tenemos demasiadas aplicaciones abiertas o activas en segundo plano. Notaremos además que nuestro teléfono funciona más lento de lo habitual, por lo que cerrando todas las aplicaciones y dejando reposar al móvil debería ser suficiente.
   
• Quitar la funda protectora: el hecho de tener más capas por encima de lo habitual puede hacer que el teléfono reconcentre el calor aún más de lo que lo haría sin estar protegido. Además, si nuestra funda no es oficial o de un proveedor especializado, es posible que está no esté acondicionada para que el teléfono tenga una ventilación adecuada. En casos de que el teléfono se caliente mucho, es recomendable retirar la funda durante un tiempo considerable para que pueda recuperar una temperatura óptima.
   
• Reducir el nivel de brillo: el brillo de nuestro dispositivo también provoca un mayor consumo de recursos y de batería, por lo que si bajamos la intensidad del mismo nuestro teléfono no se calentará tan rápido.
   
• Acercar el teléfono a entornos fríos: a la hora de dejar reposar nuestro teléfono para bajar su temperatura, las condiciones del sitio donde lo dejemos reposar también son importantes. Dejarlo en una habitación bien acondicionada o cerca de ventiladores puede servir de ayuda para que se enfríe más rápido. También es importante no depositar el teléfono en condiciones demasiado frías como un congelador, ya que puede perjudicar seriamente a la batería del dispositivo.
   
• Evitar utilizar el teléfono mientras se carga: el teléfono puede calentarse levemente mientras que realizamos la carga del mismo, por lo que es recomendable reducir su uso lo máximo posible mientras carga, especialmente si nos encontramos en un entorno caluroso.